El proyecto consiste de una vivienda de fin de semana en la localidad de Villa del Dique, en Córdoba, Argentina.
La premisa principal fue la simpleza en el programa y la austeridad del único material propuesto, el hormigón.

En el ingreso se plantea la cochera para autos y un gran depósito para guardado de utilitarios para la casa. Estos dos usos se encuentran contenidos en una “caja” que enmarca el acceso casi en la totalidad del ancho del terreno. Por la derecha se encuentra un camino que nos dirige hacia el ingreso de la vivienda. Un volumen puro de hormigón, casi ciego en su totalidad, no recibe con una puerta al final del camino. La vivienda se desarrolla mayoritariamente en planta baja, albergando allí los espacios sociales en relación directa con el ingreso y la galería que ocupa todo el largo de la construcción. Luego a través de un pasillo en relación a un patio de luz interno se accede al primer dormitorio. Dentro del espacio principal en doble altura encontramos una escalera que nos lleva al segundo dormitorio, un poco más privado, y con visuales directas hacia el área de la piscina. Esta última se encuentra en relación directa a la galería, que por momentos se convierte en solárium, y por momentos en área social en contacto con sector asador, que se encuentra oculto detrás de una celosía de madera.

En cuanto al material predominante, y casi único, de la construcción, nos permitió generar una calidad expresiva sobria, moderna y austera. El hormigón visto y sus propiedades de resistencia, hacen innecesario cualquier tipo de acabado superficial, y el dejar que el material trabaje naturalmente le da un aspecto rústico a la vivienda en su totalidad.